La industria global de semiconductores, con una capitalización de más de US$ 4 billones, se ha consolidado como el pilar fundamental del sector tecnológico. La industria de estos microcomponentes, producidos de elementos puros como el silicio, germanio o galio, están experimentando un crecimiento exponencial impulsado por la industria de la inteligencia artificial (IA) y la competencia económica global.
La industria de semiconductores se caracteriza por su alta especialización, su cadena de valor integrada, y su importancia geopolítica. La misma está integrada por los segmentos de diseño, fabricación y ensamblaje, liderados por fabricantes integrados (IDMs) tales como Samsung o Intel; las empresas de diseño (fabless) tales como AMD o Nvidia; y fabricantes (foundries) tales como TSMC o UMC.
La importancia de esta industria hace que la misma se vea afectada por factores geopolíticos. Con implicancias económicas y militares, los semiconductores son un elemento clave de rivalidad entre Estados Unidos y China, dando origen a la “Chips War”.
Por ejemplo, en 2023 Estados Unidos prohibió a sus empresas vender semiconductores a China, reclamando a sus aliados a seguir los mismos pasos. China, por su parte, respondió limitando las exportaciones de galio y germanio, necesarios para fabricar semiconductores con casos de uso críticos en sistemas de defensa de misiles, satélites y radares, entre otros. Es importante destacar que China produce el 60% del germanio mundial y el 80% del galio.
Pero independientemente de las tensiones geopolíticas, se proyecta que la industria de semiconductores alcance la cifra de un trillón de dólares para 2030. Se estima que este crecimiento en la demanda de semiconductores será impulsado principalmente por algunas industrias clave. Entre ellas, se pueden citar la industria automotriz, con el crecimiento de los vehículos eléctricos; los sistemas de automatización y almacenamiento de datos, con el auge del cloud computing y el impulso de la IA; y las tecnologías inalámbricas, con el desarrollo del IoT y el 5G.
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