Buques de GNL: el Gobierno ahorrará US$156 millones en importación de energía

Barco transportando lng

Gracias a las altas temperaturas que sorprendieron en los últimos días, la empresa estatal Energía Argentina (Enarsa) decidió dar de baja tres adjudicaciones de buques de gas natural licuado (GNL) que estaban previstos para llegar en agosto. De esta manera, el Banco Central (BCRA) tendrá un alivio de divisas de US$156 millones el mes próximo. A su vez, al vender la operación, recibirá un ingreso de US$46,8 millones.

Este año, Enarsa adjudicó en total 38 buques (descontando los tres que dio de baja) por un total de US$2769 millones. En el invierno pasado, la empresa estatal compró 51 buques de GNL por un costo total de US$1100 millones, pero a precios promedio del gas de US$8,33 el millón de BTU (medida inglesa que se utiliza en el sector).

La salida de la pandemia disparó los precios del gas incluso antes de que estallara la invasión de Rusia a Ucrania. Las menores inversiones realizadas en producción de gas durante el peor momento del Covid afectaron la oferta disponible, que no se correspondió con la reactivación de la demanda. Por lo tanto, este año, el precio de GNL promedió los US$27 por millón de BTU, lo que implicó que, a pesar de haber comprado menos buques, los precios pagados más que duplicaron los del año pasado.

“Las temperaturas fueron más altas para este mes. El promedio para el mes de julio eran 10 grados y tuvimos un promedio de 12 grados, que colaboró para que la demanda sea menor y poder liberar la importación de GNL”, explicaron fuentes oficiales de Energía.

Los tres buques que dio de baja Enarsa tenían como destino Escobar, que tiene una capacidad de regasificación de 22 millones de metros cúbicos por día (m3/d), mayor a los 15 millones de capacidades del de Bahía Blanca. Además de ahorrarse el pago de los US$156 millones por los tres buques, Enarsa vendió la operación a un trader por US$46,8 millones, según detallaron.

“En virtud de temperaturas por encima de las pronosticadas originalmente y la buena disponibilidad de oferta de importación de energía eléctrica competitiva durante julio, la Secretaría de Energía coordinó con los despachos gasíferos y de energía eléctrica una reprogramación que permitió capitalizar oportunidades de mercado y una gestión eficiente de recursos. Se gestionó a través de Enarsa con sus proveedores de GNL reprogramaciones de fecha para pasar producto de julio a agosto”, explicaron en Energía.

“Enarsa canceló tres cargos de Escobar de agosto (menor salida de divisas por US$156 millones) y recibirá un premio por esas cancelaciones de US$46,8 millones. Se gestionó a través de Cammesa una reprogramación con descuento (US$2,2 millones), de tres buques de gasoil y dos de fueloil que pasaron de agosto a septiembre”, agregaron.

A su vez, en caso de que aumente la demanda de energía, se está gestionando con Brasil reforzar la importación de energía eléctrica, para captar ofertas de oportunidad para agosto. “En caso de haber una necesidad de energía, las importaciones de Brasil son más baratas que el GNL”, dijeron.

El aumento internacional de los precios del gas y el gasoil pegó de lleno en las reservas del Banco Central, que no pudo aprovechar la suba en igual proporción de las cotizaciones de las commodities. De hecho, en julio, la entidad monetaria vendió más de US$1000 millones en el mercado cambiario, más de lo que había comprado en todo junio.

Miguel Pesce, presidente del BCRA, indicó que en agosto, las importaciones de energía disminuirán de los US$2000 millones mensuales de junio y julio (mayor demanda por las bajas temperaturas) a alrededor de US$800 millones.

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