El mayor yacimiento de petróleo del mundo bajo el agua escupe un crudo muy diferente

Bajo la arena ardiente de Arabia Saudí, donde el sol calienta a altísimas temperaturas, la arena de las dunas y la vida se adapta a la escasez, se esconde un tesoro energético que curiosamente se oculta bajo el agua. El país de los desiertos y la arena tiene también grandes cantidades de ‘oro negro’ bajo el mar. El mayor yacimiento de petróleo marino del mundo se encuentra bajo las aguas del Golfo Pérsico. De este modo, en un país donde todo parece seco y dorado, el oro negro también ‘brota’ desde el subsuelo marino. Allí, entre los pliegues geológicos que se formaron hace millones de años, duerme una riqueza energética sin parangón: el campo de Safaniya, un gigante sumergido que late al ritmo de los barriles que emergen cada día. De este modo, Arabia Saudí cuenta con dos de los cinco mayores yacimiento de petróleo del mundo en su territorio.

Descubierto en 1951 y puesto en producción apenas seis años después, Safaniya sigue siendo una de las joyas de la corona energética saudí. Con una capacidad de producción que ha llegado a superar los 1,5 millones de barriles diarios, este gigante opera hoy a un ritmo de aproximadamente 1,3 millones de barriles al día. Es propiedad de Saudi Aramco, el coloso estatal que gestiona las vastas reservas del reino y que de forma coloquial (no científica ni estricta) se puede decir grosso modo que conoce cada rincón de esta gigantesca estructura subterránea.

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Diplomatura en producción de litio