El congelamiento de precios en los combustibles ya empieza a generar distorsiones en el sector petrolero. En agosto, la refinación de naftas y gasoil registró una caída interanual del 8,4% en todo el país, según destaca un informe de la consultora Economía & Energía.
Según el reporte, las bajas más abruptas se dieron en la refinería Luján de Cuyo de YPF (-19,2%), en Dock Sud de Raízen (-15%), en La Plata también de YPF (-8%) y en Campana de Axion (-5,4%).
Comparado con el mes anterior, cuando no estaba vigente este congelamiento, la refinación de La Plata se contrajo un 12,4% por una parada técnica, en Luján de Cuyo y en Campana un 9,6% y en Dock Sud un 5,1%.
Esto tuvo un correlato directo en la cantidad de crudo procesado que bajó en un 17,8% a nivel interanual en la Cuenca del Golfo San Jorge, un 5% en la Cuenca Neuquina y un 2% en el resto del país, lo que arroja una merma total del 9,5%.
Crecen las ventas de naftas
Sin embargo, la venta de combustibles no sólo no cayó en la misma proporción en el gasoil (-1,3%), sino que aumentó en el caso de las naftas (2,8%). Una brecha que fue cubierta por importaciones a cargo de YPF.
En naftas, Shell reportó una baja interanual del 3,9%, seguida por Axion con un 1,3%. Por el contrario, YPF ganó market share y sus ventas subieron un 6,5% por su precio más bajo y por hacerse cargo de importaciones a pérdida.
“Se cubrió con importaciones a pérdida por YPF en gasoil y Shell en gasoil y naftas. Se explica por la brecha con el import parity y la demanda de los países vecinos, donde la diferencia de precios llega a los 50 centavos de dólar por litro contra Chile y a un dólar por litro contra Uruguay”, explica el consultor Juan José Carbajales.
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