Una maniobra de Irán pone en riesgo la mayor ruta petrolera del mundo

La semana pasada Irán secuestró dos buques petroleros en Grecia , el propietario de barcos cisterna más grande del mundo, aumentando el riesgo de más interrupción en los envíos desde una región que es una fuente vital del suministro de energía mundial.
El viernes, Irán desvió dos petroleros griegos, cada uno cargado con alrededor de 1 millón de barriles de petróleo, hacia sus aguas territoriales, un aparente ojo por ojo relacionado a un barco que el país europeo incautó previamente.
Grecia es la nación petrolera más grande del mundo lo que hace que cualquier disputa con Irán sea potencialmente grave para el mercado global. Asimismo, alrededor de una quinta parte del suministro diario de crudo para por el Estrecho de Ormuz, la estrecha via fluvial que separa el Golfo Pérsico del Océano Índico y los compradores de crudo de todo el mundo.
Lea la nota completa en Río Negro.