Vaca Muerta a contramano de la economía argentina

El desarrollo de Vaca Muerta ha permitido a la provincia de Neuquén no sólo recuperar el primer puesto como productora de hidrocarburos del país, sino también que ha generado un marcado crecimiento económico en la última década, cuando la Argentina se ha mantenido estancada.
Desde 2012, la economía de la provincia creció 3,1% promedio y 35% en 10 años, mientras que la Nación lo hizo un 0,2% promedio, apenas 2,4% en 10 años. La suba de la producción de los últimos años, y por ende la recaudación por regalías de petróleo y gas, han permitido que la provincia tenga superávit fiscal y sea la más autónoma después de la Ciudad de Buenos Aires.
“Sólo el 20% de sus ingresos provienen de aportes federales, cuando el promedio consolidado supera el 50% y la mediana el 60%. El año que viene probablemente se ubique incluso por encima de CABA”, señaló a +e el economista Rodrigo Álvarez, uno de los socios fundadores de Bituin Inversiones.
Así es que la coyuntura actual permite la provincia tener una relativa independencia del ciclo productivo nacional. El presupuesto provincial más que se duplicó en 12 años. Pasó de USD 1.100 millones en 2008 a USD 2.400 en 2023 (+120%) con superávit fiscal. Para 2023 se proyecta un superávit de $36.806,6 millones, y se estima que se ahorrarán unos $19 mil millones para el FEDEN (Fondo anticíclico). Las proyecciones del equipo de Bituin Inversiones indican que el producto bruto geográfico (PBG) se podría duplicar a 2030 en escenarios conservadores de precios e inversión.
“Cuando se mira la historia, un punto de inflexión se dio entre 1982 y 1985, en que Argentina pasó de invertir 5% más que el promedio más de Latinoamérica a 5 puntos menos; 7 puntos caímos nosotros en términos absolutos y la región subió 3. La Argentina está invirtiendo tan poco por dos cuestiones: falta de financiamiento externo, en los 80 fue crisis de deuda, hoy es un cepo y una beca cambiaria de más del 100%; y, al igual que en los ’80, hoy existe una inflación que invalida la posibilidad de tener financiamiento en pesos”, explicó Álvarez.
“El crédito en relación al PBI es del 7%, básicamente el registro de una economía totalmente carente de proyección a largo plazo, cuando Brasil tiene niveles de más del 60%, Chile en torno al 100%, y la región más del 50%”, agregó.
El economista subrayó que para sostener el crecimiento de Vaca Muerta hace falta financiamiento, que hoy proviene de la reinversión de utilidades de las compañías que no pueden tener libre acceso a los dólares.
“Hoy tenés una Ferrari que la estás manejando a 40 kilómetros por hora. No se pueden captar más inversiones para acelerar el proceso de crecimiento a pesar de que ya probaste la calidad del recurso, la productividad de los pozos está 20% por encima de los comparables de los Estados Unidos. Tenés un jugador de clase mundial, pero para acelerar su desarrollo se necesita que ingresen capitales”, indicó Álvarez.
Lea la nota completa en Más Energía.