Comenzó a fracturar el primer pozo del «área maldita»

Vaca Muerta tiene una gran cantidad de áreas, algunas destacadas por las inversiones inyectadas, otras por la producción que brindan y una por la compleja historia de reveses que ha tenido en su concesión que la han hecho ganadora del apodo del «área maldita» de la formación. Se trata de Parva Negra Oeste en donde hace pocos días comenzó la fractura del primer pozo con destino a shale con el que las firmas socias esperan dar vuelta la página oscura del bloque.
El pozo en cuestión, denominado PNO x-2, fue perforado primer en forma vertical y testeado, al igual que su pozo hermano, el PNO x-3. Ahora las firmas socias Capex y Gas y Petróleo del Neuquén (GyP) sumaron en este primer pozo la extensión de una rama horizontal en donde se comenzaron a realizar las primeras etapas de fractura para que brinde su mayor producción.
Por su ubicación y el resultado de los testeos, el pozo brinda gas natural, y ese es precisamente el interés que tiene Capex para engrosar su producción propia que utiliza luego en complejos como la central térmica Agua del Cajón para generar energía eléctrica.
Según se supo, este primer pozo con el que esperan romper la racha de malas noticias del bloque, tendrá 22 etapas de fracturas, ya que contará con una particularidad. Dos de esas etapas se realizarán sobre el nivel de navegación conocido como La Cocina, y las restantes 20 en El Orgánico, intentando así testear ambas franjas de productividad de la formacion shale.
Este primer pozo hacia Vaca Muerta del bloque es el eje del compromiso de inversión que firmaron las autoridades de Capex a fines del 2019 cuando se asociaron con la estatal GyP, que es la titular del área.
Luego de este desarrollo, el contrato de asociación que corresponde a la etapa de exploración marca que las firmas deberán realizar otros dos pozos exploratorios, tras los cuales se podrá (o no) solicitar la concesión no convencional del bloque.
Por qué es el área maldita de Vaca Muerta
La mala fortuna que se asocia a Parva Negra Oeste no es casual y se debe a que en un plazo de tan solo cuatro años el bloque fue concesionado dos veces pero en ambos casos los procesos terminaron en la reversión del área ante la incapacidad de las empresas concesionarias de reunir los fondos para realizar las inversiones a las que se habían comprometido.
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